La primavera ya está entre nosotros. Si sos de las mías, seguramente todavía no guardaste tu ropa de abrigo y ni siquiera empezaste a ver qué tenés en tu placard para la temporada que se viene. Los precios de las vidrieras te abruman y suponés que vas a poder incorporar muy poco de lo que está a la venta. Y este panorama, a decir verdad, te deprime bastante. Abrís tu placard y está que explota, pero siempre surge la frase recurrente: “¡No tengo NADA que ponerme!”
Antes de comprarte algo nuevo, te propongo un desafío: crear un “armario-cápsula”.
¿Qué dirías si te aseguran que podrías vestirte toda la primavera con tan sólo 37 prendas, incluidos los zapatos y los abrigos? ¿Y si te digo que parte de esas prendas ya las tenés en tu placard?
Esta inspiradora idea no es propia. Se le ocurrió primero a Caroline, una norteamericana oriunda de Austin (Texas) y el alma fashionista detrás del blog “UnFancy” (http://www.un-fancy.com/).
Para esta blogger, “menos es más”. Luego de un largo camino recorrido, de mucho tiempo y dinero invertido en las tiendas, arribó a la inteligente conclusión de reducir su guardarropas a tan sólo 37 prendas. Y lejos de sentir privación, este paso le abrió camino hacia el descubrimiento de un estilo propio y hacia la creatividad a la hora de vestirse a diario. Y lo más importante, arribó a un método que es posible compartir y poner en práctica.
La cantidad de prendas por cada categoría es subjetiva. En el caso de Caroline, amante del calzado, se aplica la siguiente distribución: 9 pares de zapatos, 9 prendas para la parte de abajo (entre pantalones, leggins, shorts y polleras), 15 prendas para la parte de arriba (entre camisas, remeras, tops, sweaters/sacos), 2 vestidos y dos abrigos.
En tanto, la cantidad de accesorios (carteras/bijou), de ropa interior, ropa de dormir y trajes de baño puede ser ilimitado.
Para seguir al pie de la letra este método, es imprescindible que sólo tengas a mano las prendas que vas a utilizar durante cada estación. Por eso, lo más conveniente es separar de tu placard aquellas prendas que están fuera de la temporada en curso (por ejemplo, los abrigos de invierno en pleno verano), y ubicarlas en cajas debajo de la cama o en algún espacio aparte dentro del mismo placard.
Regla # 1
La regla número 1 de todo “armario-cápsula” es usar y combinar sólo estas 37 prendas durante los tres meses de cada temporada ¡Prohibido ir de compras en ese lapso!
Pero, para las amantes del shopping, no todo está perdido. En las últimas dos semanas de cada estación, es cuando podrás incorporar prendas para el siguiente período, previa planificación (recordá que la idea es mantenerse minimalista, y no perder el control y el orden de tu armario). Lo recomendable, entonces, será comprar entre 4 y 8 items nuevos por estación.
¿Es posible no aburrirte de tu ropa y sentir que siempre te ponés lo mismo? La misma Caroline, desde su blog, demuestra a diario que vestir con menos puede ser más divertido, creativo y variado ¡Y para nada aburrido!
¿Estás lista para unirte al desafío del “armario-cáspsula” esta primavera?
